Rechazamos enérgicamente la declaración impertinente e ilegal que apunta a la integridad territorial de nuestro país, realizada por la denominada Asamblea Popular del régimen, que carece de legitimidad democrática y no representa en ningún caso al pueblo sirio.
Tales declaraciones son también signos de la impasibilidad del régimen, que ha estado oprimiendo a su propio pueblo durante años, responsable de la muerte de cientos de miles de personas inocentes y del desplazamiento de millones de personas de sus tierras y hogares.
Turquía, como en el pasado, hoy y también en el futuro, tiene perseverancia y determinación para responder a las despreciables aspiraciones contra su patria y a cualquier amenaza contra sus intereses nacionales.