Señora Ministra, distinguidos colegas, estimadas señoras y señores,
Tengo el gran placer de inaugurar oficialmente la 14ª Conferencia de
Embajadores.
Como ya saben, nuestro pueblo dio un fuerte mensaje de confianza y
estabilidad en las elecciones. Los próximos cinco años ofrecen una
oportunidad histórica para cumplir nuestros objetivos de política exterior.
Bajo el liderazgo de nuestro reelegido Presidente, trabajaremos
incansablemente para reforzar la posición de Türkiye como actor totalmente
independiente, efectivo e influyente que marca la agenda internacional, que
configure el juego y también rompa la baraja si fuera necesario.
Para nosotros, la orientación estratégica y la gestión de nuestra política
exterior son muy claras. Una política exterior plenamente nacional,
independiente de todo tipo de influencias externas, basada en nuestras
crecientes potenciales y capacidades configuradas en torno a los valores de
nuestra civilización, con el objetivo de fortalecer la integridad, la
seguridad y la prosperidad de nuestro Estado y nuestra nación, y que
constituye el centro de atracción en nuestra región. En otras palabras, la
política exterior del Siglo de Türkiye. Trabajaremos con todas nuestras
fuerzas para llevar a cabo esta visión con ustedes, nuestros estimados
embajadores.
Estimados colegas, la Conferencia de Embajadores ofrece la oportunidad de
abordar nuestra visión de una política exterior nacional en el Siglo de
Türkiye. Juntos, tomaremos una fotografía actual de las diferentes
dimensiones de nuestras relaciones exteriores y formularemos previsiones
estratégicas para el futuro.
Proporcionaremos propuestas concretas orientadas a la obtención de
soluciones los riesgos y oportunidades que nos aguardan en el próximo
periodo.
Tendremos la oportunidad de reunirnos con nuestros estimados ministros y
directores de instituciones y abordarnos los ámbitos de la economía, el
comercio, la seguridad, la defensa, la inteligencia, la energía, la cultura
y la comunicación, que son componentes importantes de nuestras relaciones
exteriores.
Al visitar la “Gazi” Gran Asamblea Nacional de Türkiye, que conforma la
expresión concreta de la voluntad nacional, trataremos con el Honorable
Presidente de la Asamblea sobre los valores esenciales de la democracia
parlamentaria.
El Presidente Recep Tayyip Erdoğan nos acogerá y recibiremos sus
instrucciones en el ámbito del curso del Siglo de Türkiye, y definiremos y
configuraremos nuestra postura ante el mundo, que se encuentra en vísperas
de un nuevo sistema internacional.
Estimados colegas, desgraciadamente, el actual sistema internacional es
incapaz de producir paz, estabilidad y justicia para una gran parte del
mundo. Somos testigos de que la competencia entre las grandes potencias
aumenta la tensión y la polarización a escala mundial. El sistema
internacional, que se aleja gradualmente del equilibrio, contiene muchos
acontecimientos imprevisibles, lo que incrementa su fragilidad. Nos
enfrentamos simultáneamente a numerosos retos políticos, militares,
económicos, medioambientales, tecnológicos y sociales. Los conflictos
armados, el terrorismo, la migración irregular, la xenofobia y la
islamofobia, el cambio climático y la crisis de los residuos se
desencadenan y amplifican mutuamente. Mientras el mundo está preocupado por
no saber adónde nos llevará la guerra que ha estallado muy cerca de
nosotros, en Europa, también se enfrenta a los retos globales de la
inflación, el estancamiento económico, la crisis energética y la escasez de
alimentos causados por la guerra. El aumento de la prosperidad derivado de
la globalización no se ve repartido equitativamente a escala internacional.
Las organizaciones responsables de la administración internacional y
regional son a menudo incapaces y, a veces, carecen de la voluntad
necesaria para hacer frente a esta grave situación. Mientras algunos países
intentan navegar solos en este entorno, observamos un aumento del
proteccionismo y la discriminación en los ámbitos económicos y sociales.
Las tecnologías revolucionarias, en particular el ciberespacio, la
inteligencia artificial y la cuántica, ofrecen oportunidades en muchos
ámbitos diferentes como la economía, la seguridad, el desarrollo, el
transporte y la salud. Estas tecnologías han encontrado ahora un lugar
entre los nuevos ámbitos de la diplomacia.
Por otra parte, estas tecnologías también plantean riesgos para la
seguridad y pueden ser utilizadas con fines delictivos por organizaciones
terroristas y países hostiles. Como resultado, el sistema mundial está
experimentando “una época de crisis más complejas y múltiples. La historia
nos ha demostrado con amarga experiencia que tales crisis no pueden
continuar de esta forma para siempre. Es necesario un cambio, pero ¿cómo
ocurrirá este cambio? ¿Quiénes serán los actores? La forma que adopte el
sistema internacional en este punto de ruptura dependerá de las
preferencias políticas de los estados líderes y de su capacidad para
llevarlas a la práctica. Türkiye, bajo el liderazgo del Presidente Recep
Tayyip Erdoğan, es sin duda uno de estos estados líderes.
Distinguidos Embajadores, en el centenario de nuestra República y el 500º
aniversario del establecimiento de las bases del Servicio Exterior, nos
adentramos en el “Siglo de Türkiye”. Nuestra visión es hacer de Türkiye uno
de los actores creadores de sistemas en el “Siglo de Türkiye”. Alcanzaremos
este gran objetivo anticipándonos al cambio y dándole forma. Trabajaremos
con otros países para establecer un sistema internacional eficaz, inclusivo
y humanitario que elimine las injusticias globales, aborde las
desigualdades económicas y promueva la paz, la seguridad, la estabilidad y
la prosperidad.
Reconociendo que los grandes cambios requieren paciencia estratégica y una
voluntad firme, avanzaremos con pasos modestos pero firmes. Al conseguirlo,
actuaremos en línea con cuatro objetivos estratégicos básicos: establecer la
paz y la seguridad en nuestra región, asentar nuestras relaciones exteriores
sobre una base estructural, mejorar el entorno de bienestar y avanzar en
nuestros objetivos globales.
En el marco de nuestro primer objetivo de establecer la paz y la seguridad
en nuestra región, intensificaremos nuestras medidas e iniciativas para
reducir las zonas de conflicto. Las organizaciones terroristas y otras
organizaciones de carácter instrumental son la mayor amenaza para la
seguridad, la paz y la estabilidad en nuestra región. No importa si se
llaman FETÖ, PKK-YPG o DAESH, junto con todas nuestras instituciones
pertinentes, no permitiremos que las organizaciones terroristas y las
fuerzas que se encuentran detrás de ellas penetren en nuestro país y en
nuestra región. En este sentido, continuaremos nuestra lucha incrementando
nuestras capacidades militares, de inteligencia y tecnológicas a escala
nacional, y garantizando una cooperación eficaz con nuestros amigos en el
exterior.
Seguiremos trabajando con obstinación y tenacidad para poner fin a la
guerra en Ucrania y establecer la paz en dicho país. Nos preocupa la
reciente escalada del conflicto bélico. Como responsables de la aplicación
de la Convención de Montreux, nuestra principal prioridad será mantener la
tranquilidad, especialmente en el Mar Negro, e impedir cualquier intento de
ponerla en peligro.
Continuaremos nuestros contactos con todas las partes implicadas con el
objetivo de reactivar la Iniciativa de Cereales del Mar Negro, que afecta a
todos los hogares del mundo. Como saben ustedes, Türkiye es el único actor
capaz de conseguirlo.
Por otra parte, seguiremos siendo el principal defensor de la solución del
conflicto en Siria mediante un proceso político y sobre la base de la
integridad territorial de Siria. Haremos todo lo posible para evitar que
Siria se convierta en refugio de organizaciones terroristas y en un terreno
para guerras subsidiarias. También intensificaremos nuestros esfuerzos para
garantizar el retorno seguro y digno de los refugiados a Siria.
Somos el principal defensor de la integridad territorial y la estabilidad
política de Irak, que es otro país vecino. Con este fin, seguiremos apoyando
la eliminación de las organizaciones terroristas de Irak, en particular el
PKK.
Deseamos que nuestras relaciones con todos los países en nuestra región
avancen dentro de una agenda positiva. Creemos que el actual ambiente
positivo ofrece una gran oportunidad para encontrar una solución a las
cuestiones controvertidas con nuestro vecino Grecia. En este aspecto somos
sinceros y esperamos que la parte griega también lo sea y muestre la misma
sinceridad.
Al mismo tiempo, nuestra posición en Chipre, nuestra causa nacional, es
clara. Nuestra política fundamental es la reafirmación de la igualdad
soberana y el estatus internacional equitativo de los turcochipriotas.
Seguiremos protegiendo con tacto nuestros derechos e intereses en el Egeo y
el Mediterráneo Oriental.
Ante el reciente aumento de los golpes de Estado y la inestabilidad en
África, estamos tomando medidas precautorias para establecer la seguridad y
garantizar la paz. Para una paz duradera en Libia, es esencial celebrar
sin más demora elecciones presidenciales y parlamentarias transparentes,
justas y libres en todo el país sobre la base de un amplio consenso.
Nuestros procesos de reconciliación y normalización en Oriente Próximo
y el Cáucaso Sur han cobrado impulso. Sobre los cimientos de nuestros
principios fundamentales de política exterior, procuraremos resolver
los problemas, aumentar el número de nuestros amigos y fortalecer aún
más nuestras amistades existentes.
Para la estabilidad, la paz, la prosperidad y la seguridad en el Cáucaso
Meridional, es esencial el progreso coordinado de los procesos
Türkiye-Armenia y Azerbaiyán-Armenia.
El único camino hacia una paz duradera en Oriente Medio es una solución de
dos Estados basada en los parámetros internacionales y en el
establecimiento de un estado Palestino soberano e independiente con
Jerusalén Este como su capital. Nos opondremos a cualquier medida que
perjudique esta visión y a las provocaciones dirigidas contra nuestra
primera alquibla, la Mezquita de Al-Aqsa Seguiremos comprometidos con
nuestros hermanas y hermanos palestinos.
En los Balcanes, una región cimentada sobre delicados equilibrios, el país
y el líder político en el que todos los países y naciones confían
conjuntamente es Türkiye y nuestro Presidente Recep Tayyip Erdoğan,
respectivamente. El error más grave que se puede cometer en los Balcanes es
calificar a Türkiye como una potencia externa, o peor, como un enemigo,
utilizando algunos conceptos hipotéticos infundados y desconectados de la
Historia .
En un entorno en el que se está tratando la adhesión de todos los países
balcánicos, así como de Moldavia y Ucrania a la UE y a la OTAN, la
interrupción del proceso de adhesión de Türkiye a la Unión Europea refleja
una ceguera estratégica. En este nuevo periodo, es importante enfocar las
relaciones de Türkiye-UE con una visión de futuro y reactivar el proceso
con una perspectiva de plena adhesión. En línea con el llamamiento del
Presidente Erdoğan para la reactivación del proceso de adhesión de Türkiye
a la Unión Europea, nos gustaría subrayar una vez más, desde esta
plataforma, que la Unión Europea no puede ser un verdadero actor global sin
Türkiye.
También esperamos que la OTAN, en condiciones de igualdad, preste la misma
consideración a las amenazas y problemas de seguridad que afrontan todos
sus miembros. En este contexto, reiteramos nuestro llamamiento a algunos
países de la OTAN para que pongan fin de inmediato a su cooperación abierta
y encubierta con el PKK en Siria e Irak.
Nuestro segundo objetivo es asentar nuestras relaciones exteriores sobre
una base estructural. En el sistema internacional actual, la consecución de
avances requiere un trabajo a largo plazo. La tarea real y más difícil es
conseguir que los avances sean permanentes y se institucionalicen en el
sistema internacional. Procuraremos que nuestros sistemas existentes de
cooperación y alianza sean más eficaces en los ámbitos político, militar,
económico, entre otros.
Un ejemplo de esta institucionalización es la iniciativa visionaria de la
Organización de Estados Túrquicos, que abarca todas las raíces de nuestra
civilización. Llevaremos adelante esta iniciativa, que despierta un gran
entusiasmo en el gran mundo turco, a las siguientes etapas de integración.
Asimismo, implantaremos iniciativas similares para intensificar la
solidaridad dentro del mundo islámico. De este modo, transformaremos
nuestra capacidad de cooperación técnica, reconocida mundialmente, a fin de
que sea más sistemática y efectiva.
Utilizaremos nuestros consejos de cooperación estratégica de alto nivel y
los mecanismos de consulta regional de forma más eficiente y productiva. De
igual forma, buscaremos nuevas alianzas y asociaciones enriqueciendo nuestra
red de relaciones exteriores y de cooperación. En este punto, la orientación
de nuestros estimados embajadores será extremadamente importante.
Nuestro tercer objetivo es mejorar el entorno de prosperidad. Nuestras
contribuciones a la paz, la seguridad y la estabilidad regionales
conllevarán también un incremento de la prosperidad. En el “Siglo de
Türkiye”, nos dedicaremos a hacer que los pilares económicos, comerciales y
financieros de nuestras relaciones bilaterales y regionales sean más
sistemáticos e institucionalizados. Una economía fuerte y autosuficiente
con acceso a oportunidades globales es el mayor poder de nuestro país.
Planificaremos y conduciremos nuestra política exterior de forma que apoye
estos objetivos económicos.
Apoyaremos el desarrollo de instrumentos financieros y económicos
alternativos con el objetivo de garantizar la seguridad financiera de
nuestro país y nuestra región. En este contexto, contribuiremos a la
realización de transacciones económicas extranjeras en moneda local.
Aplicaremos políticas para acelerar la circulación de personas, capitales,
bienes y servicios, empezando por las regiones más cercanas a nuestro país.
Seguiremos intensificando nuestros esfuerzos para la actualización de la
Unión Aduanera con la Unión Europea y la liberalización de los visados.
En línea con nuestro objetivo de convertirnos en una de las diez primeras
economías del mundo, desarrollaremos y diversificaremos nuestras relaciones
comerciales y económicas con países de todas partes del mundo. Cumpliremos
cuidadosamente con nuestro papel en la dimensión de relaciones exteriores de
los pasos necesarios hacia la transformación de las áreas de alta y crítica
tecnología, incluida la industria de defensa, en la locomotora de la
economía. Reforzaremos nuestra posición como núcleo en los corredores de
energía y transporte y aumentaremos nuestra capacidad de conectividad.
Concedemos gran importancia y apoyamos el proyecto de carreteras de
desarrollo de Irak en lo que se refiere al fortalecimiento de la paz y la
prosperidad en la región. Daremos prioridad a proyectos de conectividad como
el gasoducto de gas natural TANAP y el corredor del transporte central
este-oeste transcaspiano, que constituyen las rutas más convenientes y
confiables en los ámbitos de la energía y el transporte. De este modo,
contribuiremos de forma concreta a la seguridad de la cadena energética y
de suministro de todos los pueblos de la región.
Nuestro cuarto objetivo es contribuir al progreso de los objetivos
globales. En este contexto, restableceremos un marco más permanente e
institucionalizado para nuestra “Iniciativa de Asia de Nuevo” y nuestras
iniciativas de asociación con América Latina y África. Seguiremos
contribuyendo a la solución de los problemas globales para un orden mundial
más justo. Porque somos una nación que no soporta las injusticias globales.
Nuestro Presidente expresa esta actitud de Türkiye en todos los foros
afirmando que "el mundo es más grande que cinco" y "un mundo más justo es
posible".
La reforma de las instituciones establecidas tras la Segunda Guerra Mundial
se ha convertido en una necesidad. Seguiremos esforzándonos por garantizar
una representación más justa en las Naciones Unidas y otras organizaciones
internacionales y por aumentar la eficacia de estas organizaciones.
Defenderemos la reforma de las instituciones financieras internacionales de
manera que se ponga fin a la crisis de la deuda y se establezca una
infraestructura de desarrollo sostenible. Desempeñaremos nuestro papel en
la lucha contra la crisis climática, en línea con los objetivos de cero
emisiones netas para 2053 y de “revolución del desarrollo verde” anunciados
por nuestro Presidente. La iniciativa de cero residuos, que hemos puesto en
marcha bajo el liderazgo de nuestra estimada Primera Dama se ha convertido
en una política global desde este año.
Estimados colegas, he comunicado los objetivos que nos hemos fijado en el
marco de nuestra visión de la política exterior nacional. Se trata de
objetivos que sólo los grandes países como Türkiye pueden incluir en su
agenda e implementarlos. La historia demuestra que los Estados que dirigen
sus relaciones exteriores de manera coordinada, con múltiples partes
interesadas y de manera muy disciplinada tienen una ventaja comparativa. En
este marco, el Ministerio de Asuntos Exteriores, nos encargaremos de hacer
inventario de todos los aspectos de nuestras relaciones exteriores, de
aclarar posiciones sobre los problemas actuales y las oportunidades
estratégicas, y de mantener la coordinación entre nuestros ministerios e
instituciones. Así, será posible actuar al unísono en nuestras relaciones
exteriores. En este proceso, fortaleceremos todas las instalaciones y
capacidades de nuestro Ministerio y de las misiones en el extranjero.
Elevaremos nuestro país, que cuenta con la quinta mayor red diplomática del
mundo, a un puesto aún más alto en esta clasificación. Respaldaremos a
nuestros ciudadanos, a nuestros compatriotas, a nuestros correligionarios,
a nuestras comunidades relacionadas y a otras comunidades reprimidas cuando
y donde podamos. Los que consideran a Türkiye como su patria, los que
tienen puestas sus esperanzas en nuestra nación, sentirán el orgullo de ver
nuestra gloriosa bandera ondeando cada vez que levanten la cabeza.
Estimados embajadores, estimados colegas; contamos con importantes
objetivos en este camino en el que nos hemos embarcado para servir a nuestro
Estado y a nuestra nación. Nuestra mayor seguridad en este camino es el
trabajo realizado por nuestros estimados y experimentados embajadores, que
trabajan con sacrificio y perseverancia. Con nuestra política exterior
nacional que llevaremos a cabo bajo el liderazgo de nuestro Presidente,
respaldaremos conjuntamente la causa de Türkiye, que es la independencia
total. Descansen en paz las almas de todos nuestros héroes, incluidos
nuestros diplomáticos, que han abrazado el martirio en el camino del servir
al Estado y a la nación.
Les saludo a ustedes y a todos mis colegas de todo corazón y les deseo
mucho éxito.
Muchas gracias.